El escritor danés Halthorb S. Jaelae enunció una vez una teoría que, en reduciendoalminimo.com, resumen así:
"Cumples unos años. 15, 20, 27, 35. Llegas a un punto donde piensas que estás hecho, cocido, como un huevo duro. Cuando un huevo está duro puedes dejarlo dentro del agua hirviendo veinte horas más. Seguirá estando duro. Tu forma de pensar está construida, tus principios morales y éticos instaurados, tus ideologías fijas, tu comportamiento institucionalizado, tu biorritmo constante. Entonces, cuando todo está bajo control, cuando los límites están perfectamente definidos y el siguiente paso es obvio… todo cambia. Las estructuras se vencen, los cimientos se abren y todo lo que tenía orden y sentido ahora es caos y mundos desconocidos. Te miras al espejo y no sabes quien tienes delante. Te sientes aterrorizado y, tal vez, con un regusto placentero. El siguiente paso ya no es nunca más algo que se da por sentado. Entonces te das cuenta de que nunca has sido un huevo duro. Sigues siendo un huevo pasado por agua."